viernes, 28 de mayo de 2010

Hola de nuevo:
Este jueves nos hemos vuelto a juntar para ayudarnos y darnos las pistas que nos puedan ser útiles en nuestro camino. Tras hablar un poco sobre comunicación, la escucha, la importancia de marcarse metas, objetivos, de sacar los deseos y sueños para dedicarnos a perseguirlos con todas nuestras fuerzas nos ponemos al texto propuesto.

El de esta semana esta sacado del blog Tocando otros palillos (la referencia la tenéis al final), y es el siguiente:

A partir de hoy

Tu vida puede tomar uno de dos rumbos.
La única manera de salir adelante en la vida, es no culpar a los demás de lo que te sucede. Tu eres el arquitecto de tu vida.
Y si la vida no te ha sido muy favorable hasta ahora, el futuro puede cambiar y depende especialmente de ti.
Si has tenido muchos fracasos, estas en una excelente posición para comenzar una nueva vida, pues eres experto en conocer como no deben hacerse las cosas.
Cuando tu sabes que es lo errado, no lo repetirás en el futuro y te acercara cada vez mas al éxito. A partir de hoy tu vida puede tomar uno de dos rumbos. El éxito o el fracaso. La felicidad o la infelicidad.

Es tu decisión cual camino tomar y tienes igual oportunidad de seguir uno u otro sendero. Tienes las mismas posibilidades para cualquiera de los dos.

La forma de tomar el sendero del triunfo es... dejar de culpar a los demás!
Asumir tu propia responsabilidad y virar hacia una actitud mental positiva y constructiva.
Elimina los "si no fuera por...". "Si no fuera por mis padres yo habría hecho...", "si no fuera por este gobierno, yo estaría...", "si hubiera tenido dinero...", "si me consideraran en la oficina...",
Nada soluciona el culpar a los demás.
Si las cosas te sucedieron, es en gran parte tu responsabilidad. Asúmela y tu vida cambiará.
(anónimo)
Es el eterno tema de me hago cargo de mi vida, miro el lado positivo de las cosas, cambio lo que puedo cambiar y lo que no lo asumo como parte del aprendizaje de la vida y un largo etc.
¿Fácil? ¿Quién ha dicho eso?

Es raro el día en el que no me encuentre (y no digo que sin motivo alguno) amigas, personas conocidas, cercanas que no te cuenten penas. Parece que contando penas se hacen perdonar por que les va bien, por que la vida les sonríe y ellas mismas no se lo perdonan.
Otras simplemente las cuentan porque no saben como quitarse las cosas de encima y necesitan ser escuchadas por soledad o aburrimiento. Pero a casi a ninguna se le ocurre hacer una introspección seria de todo aquello que dicen por hablar.
Suelo tener la virtud de la escucha y lo que más me desespera son los problemas sin solución.
Una vez que te han metido en el ajo, empiezas a dar respuestas desde la sinceridad y experiencias propias que no consejos y nada vale. Se tiran balones fuera y siempre es el otro el culpable y la frase mágica es " Es que tu no puedes hablar porque a ti no te ha pasado, o no tienes idea por lo que estoy pasando." Aquí se termina la conversación., ¿Qué más puedo añadir?. Mira guapa hasta aquí hemos llegado...

Y este es el éxito para mí, hacerme cargo de mi vida y no hacer responsable a nadie de mis fallos ni errores.

¿No os ha pasado nunca?
http://katy-tocandootrospalillos.blogspot.com

Pues eso. A dejar de culpar al mundo, al gobierno, a la crisis, a los demás.... y a centrarnos en lo que puedo hacer, donde esta mi margen de acción, que cosas puedo hacer ahora para mejorar mi situación, ahora no mañana, no esperar a que los demás cambien, no esperar a que la crisis remita, no quedarse en los "si no fuera por...". ¿Aquí y ahora que puedo hacer?

Bueno pues eso. Tirarnos a la piscina. (que me he enterado que si tiene agua).
Saludos y a comernos la semana

viernes, 21 de mayo de 2010

Hola de nuevo.
El jueves salieron muchas ideas y en ellas aparecían la responsabilidad individual sobre nuestras emociones y estados de animo. Y como determinadas emociones que mantenemos hacia los demás nos perjudican y por lo tanto si queremos mejorar debemos aprender a manejarlas para que jueguen a nuestro favor. No es facil pero merece la pena.
Os dejo otro texto sacado del blog tocando otros palillos cuya referencia tenéis al final.

El saco de carbón

Un día, Jorge entró a su casa dando patadas en el suelo y gritando muy molesto.
Su padre lo llamó. Jorge lo siguió diciendo en forma irritada:
- Papá, ¡Te juro que tengo mucha rabia! Pedro no debió hacer lo que hizo conmigo. Por eso le deseo todo el mal del mundo ¡Tengo ganas de matarlo!

Su padre, un hombre simple, pero lleno de sabiduría escuchaba con calma al hijo quien continuaba diciendo:
- Imagínate que el estúpido de Pedro me humilló frente a mis amigos. ¡No acepto eso! Me gustaría que él se enfermara para que no pudiera ir más a la escuela.
El padre siguió escuchando y se dirigió hacia una esquina del garaje de la casa, de donde tomó un saco lleno de carbón el cual llevó hasta el final del jardín y le propuso:

- ¿Ves aquella camisa blanca que está en el tendedero? Hazte la idea de que es Pedro y cada pedazo de carbón que hay en esta bolsa es un mal pensamiento que va dirigido a él. Tírale todo el carbón que hay en el saco, hasta el último pedazo. Después yo regreso para ver como quedó.

El niño lo tomó como un juego y comenzó a lanzar los carbones pero como el tendedero estaba lejos, pocos de ellos acertaron la camisa.

Cuando, el padre regresó y le preguntó:
- Hijo ¿Qué tal te sientes?
- Cansado pero alegre. Acerté algunos pedazos de carbón a la camisa.

El padre tomó al niño de la mano y le dijo:
- Ven conmigo quiero mostrarte algo.

Lo colocó frente a un espejo que le permite ver todo su cuerpo. ¡Qué susto!. Estaba todo negro y sólo se le veían los dientes y los ojos. En ese momento el padre dijo:

- Hijo, como pudiste observar la camisa quedó un poco sucia pero no es comparable a lo sucio que quedaste tú. El mal que deseamos a otros se nos devuelve y multiplica en nosotros. Por más que queremos o podamos perturbar la vida de alguien con nuestros pensamientos, los residuos y la suciedad siempre queda en nosotros mismos.


Moraleja:
Ten mucho cuidado con tus pensamientos porque ellos se transforman en palabras.
Ten mucho cuidado con tus palabras porque ellas se transforman en acciones.
Ten mucho cuidado con tus acciones porque ellas se transforman en hábitos.
Ten mucho cuidado con tus hábitos porque ellos moldean tu carácter.
Y ten mucho cuidado con tu carácter porque de él dependerá tu destino.

(http://katy-tocandootrospalillos.blogspot.com/2010/01/el-saco-de-carbon.html)


¿Que opináis?
Feliz semana.

viernes, 14 de mayo de 2010

Hola a tod@s
Este jueves lo iniciamos con el resumen sobre la importancia de los aspectos de comunicación, ámbito de mejora personal para todos. Luego la conversación giró sobre casos personales que se convierten en generales para todos porque corresponden a aspectos de la rehabilitación por los que pasamos. Hablamos sobre los bajones y sus "síntomas" personales y característicos para cada uno en el proceso de rehabilitación, la importancia de seguir hacia adelante, la acción, más que la reflexión, como modo de aprendizaje, la responsabilidad de cada uno sobre su vida... En fin, seguimos aprendiendo y encontrando los impulsos necesarios para seguir adelante en esta dura pero satisfactoria carrera de largo plazo. Merece la pena luchar.

Bueno os dejo uno de los textos sobre los que reflexionaremos la semana que viene.
Aquí os dejo el primero. Sacado del libro 101 cuentos clásicos de la India recopilados por Ramiro Calle.

Insultos y Halagos

Era un venerable maestro. En sus ojos había un reconfortante destello de paz permanente. Sólo tenía un discípulo, al que paulatinamente iba impartiendo la enseñanza mística. El cielo se había teñido de una hermosa tonalidad de naranja - oro, cuando el maestro se dirigió al discípulo y le ordenó:

- Querido mío, mi muy querido, acércate al cementerio y, una vez allí, con toda la fuerza de tus pulmones, comienza a gritar toda clase de halagos a los muertos.

El discípulo caminó hasta un cementerio cercano. El silencio era sobrecogedor. Quebró la apacible atmósfera del lugar gritando toda clase de elogios a los muertos. Después regresó junto a su maestro.

- ¿Qué te respondieron los muertos? - preguntó el maestro.
- Nada dijeron.
- En ese caso, mi muy querido amigo, vuelve al cementerio y lanza toda suerte de insultos a los muertos.

El discípulo regresó hasta el silente cementerio. A pleno pulmón, comenzó a soltar toda clase de improperios contra los muertos. Después de unos minutos, volvió junto al maestro, que le preguntó al instante:

- ¿Qué te han respondido los muertos?
- De nuevo nada dijeron - repuso el discípulo.

Y el maestro concluyó:

- Así debes ser tú: indiferente, como un muerto, a los halagos y a los insultos de los otros.

El Maestro dice: Quien hoy te halaga, mañana te puede insultar y quien hoy te insulta, mañana te puede halagar. No seas como una hoja a merced del viento de los halagos e insultos. Permanece en ti mismo más allá de unos y de otros.

¿que nos enseña?

sábado, 8 de mayo de 2010

Cuaderno de Bitácora

Aquí dejo la segunda parte del jueves. Esta sacado de las conclusiones finales del libro de Ferran Ramon Cortes El cuaderno de Bitácora. Este autor tiene varios libros muy recomendables sobre temas de comunicación. Una de las áreas en las que mejorar supone un gran impacto en nuestras vidas.

CINCO HABILIDADES PARA LA COMUNICACIÓN PERSONAL

Estas son las cinco habilidades que a mí me han llevado a una nueva manera de comunicarme con la gente y a dar un giro de 180 grados a mis relaciones, tanto en mi trabajo como en mi vida personal.

1. ENCONTRAR TIEMPO
Comunicarme requiere dedicarle tiempo, todo el tiempo necesario. Este sólo lo encontramos cuando hacemos de la comunicación una verdadera prioridad, que pasa delante de cualquier otra actividad u obligación.
Busca en tu vida tiempo para la comunicación, para hablar las cosas en el momento en que se han de hablar. Sin interrupciones, sin compromisos, sin excusas. Hay que ser capaz de posponer lo que sea si una conversación requiere más tiempo y tener auténtica voluntad de comunicar.

2. ESCUCHAR CON ATENCIÓN
Toda comunicación comienza escuchando. Escuchar para descubrir, para aprender, para conocer. Para entender el punto de vista del otro. Escuchar con toda nuestra atención. A menudo no escuchamos porque nos parece que no nos interesa lo que los otros nos pueden decir, o porque nos sentimos amenazados por lo que podríamos oír si les escucháramos.
Cuando inicies la comunicación con alguien, escucha con los cinco sentidos. Lo que el otro te dice, y también lo que no te dice pero que tu puedes descubrir por el tono de su voz o por su mirada. Escucha para saber de verdad qué es lo que el otro te quiere decir, y entonces, sólo entonces, es el momento de hablar.

3. ESTAR EN CONTACTO CON LOS SENTIMIENTOS.
Con tus propios sentimientos y con los del otro. Si no eres consciente de lo que pasa por dentro de ti, tus emociones te pueden jugar una mala pasada, gobernar tu comportamiento y hacerte ser como no quieres ser. Sentimos lo que sentimos, y así tiene que ser; lo que no podemos hacer, sin embargo, es ignorarlo.
También es importante ser capaz de captar los sentimientos del otro, de ponerse en su piel, sentir (no sólo entender) lo que siente para conectar con él, saber cómo actuar y poderle ayudar.

Manténte siempre en contacto con tus sentimientos. No comuniques si notas que algún sentimiento te invade, te domina, y te puede hacer perder el control. Y trata de captar los sentimientos del otro. No hagas caso exclusivo de sus palabras, de lo que te dice; ten muy presente el sentimiento que se oculta detrás de ellas. Ponte en su piel y trata de sentir como él se siente.

4. ACEPTAR SIN JUZGAR.
Aceptarnos nos acerca. Juzgarnos nos aleja. La comunicación necesita la plena aceptación del otro, tal como es y en el momento personal en que se encuentra. Aceptar no significa estar de acuerdo, pero sí querer ver al otro tal como es, no como nos gustaría que fuera.
Abre los ojos bien abiertos a la persona que tienes delante cuando te comunicas, para verla y aceptarla tal como es. No pienses si te gusta o no te gusta. No pienses si tu harías o no harías lo mismo. Evita los juicios y las críticas, que son uno de los mayores obstáculos para la comunicación.

5. ACOMPAÑAR.
Acompañar en la comunicación significa avanzar junto al otro, a su lado, avanzando a su ritmo y dejando que llegue por él mismo a sus propias soluciones. No des consejos, ni vayas demasiado rápido, ni lleves una conversación más lejos de lo que el otro puede aguantar. Deja que el otro descubra las cosas por sí mismo. El descubrimiento tendrá mucho más valor. No hagas seguir a los otros unos caminos que no son los suyos. Tus soluciones han sido buenas para ti, pero no tienen por qué serlo necesariamente para los otros.

Ésta es la travesía de la comunicación que hemos de hacer teniendo presente cuál es el destino final, el puerto de llegada: que la comunicación nos ayude a crecer como personas y que, cuando comuniquemos, sea para amar.


Bueno, pues ahí esta el texto para reflexionar y sobre todo practicar. Practicar la escucha, la aceptación y el no juzgar. Practicar el acompañamiento. Tener en cuenta el mundo emocional que afecta a nuestra comunicación. En definitiva, pongámonos en acción y empecemos ya a mejorar estos aspectos sociales que nos van a ayudar y contribuyen a nuestro bienestar.

A navegar esta semana por las habilidades comunicativas.


viernes, 7 de mayo de 2010

Un nudo en la sábana


Hola de nuevo:
Aquí va la primera parte del texto de este jueves. Me llegó por Begoña (gracias) y me parece interesante la imagen del nudo como la forma creativa para establecer la comunicación de sentimientos y cercanía.

Un nudo en la sábana

En una junta de padres de familia de cierta escuela, la Directora resaltaba el apoyo que los padres deben darle a los hijos. También pedía que se hicieran presentes el máximo de tiempo posible.

Ella entendía que, aunque la mayoría de los padres de la comunidad fueran trabajadores, deberían encontrar un poco de tiempo para dedicar y entender a los niños.

Sin embargo, la directora se sorprendió cuando uno de los padres se levanto y explico, en forma humilde, que el no tenía tiempo de hablar con su hijo durante la semana.

Cuando salía para trabajar era muy temprano y su hijo todavía estaba durmiendo. Cuando regresaba del trabajo era muy tarde y el niño ya no estaba despierto. Explico, además, que tenia que trabajar de esa forma para proveer el sustento de la familia.

Dijo también que el no tener tiempo para su hijo lo angustiaba mucho e intentaba redimirse yendo a besarlo todas las noches cuando llegaba a su casa y, para que su hijo supiera de su presencia, el hacia un nudo en la punta de la sabana.

Eso sucedía religiosamente todas las noches cuando iba a besarlo.

Cuando el hijo despertaba y veía el nudo, sabia, a través de el, que su papa había estado allí y lo había besado. El nudo era el medio de comunicación entre ellos.

La directora se emociono con aquella singular historia y se sorprendió aun mas cuando constato que el hijo de ese padre, era uno de los mejores alumnos de la escuela.

El hecho nos hace reflexionar sobre las muchas formas en que las personas pueden hacerse presentes y comunicarse con otros.
Aquel padre encontró su forma, que era simple pero eficiente. Y lo mas importante es que su hijo percibía, a través del nudo afectivo, lo que su papa le estaba diciendo.

Algunas veces nos preocupamos tanto con la forma de decir las cosas que olvidamos lo principal que es la comunicación a través del sentimiento.
Simples detalles como un beso y un nudo en la punta de una sabana, significaban, para aquel hijo, muchísimo mas que regalos o disculpas vacías.
Es valido que nos preocupemos por las personas pero es mas importante que ellas lo sepan, que puedan sentirlo.
Para que exista la comunicación, es necesario que las personas “escuchen” el lenguaje de nuestro corazón, pues, en materia de afecto, los sentimientos siempre hablan mas alto que las palabras.

Es por ese motivo que un abrazo, o un beso, revestido del mas puro afecto, cura el dolor de cabeza, el raspón en la rodilla, el miedo a la oscuridad. Las personas tal vez no entiendan el significado de muchas palabras, pero saben registrar un gesto de amor. Aun y cuando el gesto sea solamente un nudo. Un nudo lleno de afecto y cariño.

Vive de tal manera que cuando tus seres queridos piensen en justicia, cariño, amor e integridad… piensen en ti.
Anónimo


Hablamos de comunicación. Sobre comunicar sentimientos, encontrar la manera de comunicar, lo adecuado de mantener tiempo de calidad con las personas que queremos, asegurarnos que se nos entiende lo que queremos transmitir, que llegue de verdad lo que sentimos y queremos, buscar la forma de hacerlo llegar, necesidad del feedback. Yo soy el responsable de la forma en la que me comunico.

Es importante llegar a los demás. Busquemos formas de comunicar a los demás que les queremos, que nos interesan como personas, que les apreciamos. Que el tiempo que estemos con ellos sea de verdad, del bueno.

¿Y tu que opinas?
Mañana más.